Corría el año 1949, y a la alcaldía de Fort Lauderdale, Estados Unids, se le ocurriría elevar la imaginación y la felicidad de los niños a alturas inimaginables al presentarles un Santa Claus caído del cielo.
Caído del cielo literalmente, ya que esta sería la tarea del paracaidista Robert Niles, quien tras caer en un campo deportivo local, lleno de niños, comenzaría a repartir regalos. Sin embargo, y con un infortunio extremo y sin igual, nada salió como estaba planeado por las autoridades, quienes esperaban brindar a sus ciudadanos un espectáculo y experiencia sin igual pero terminaron traumatizando a los niños, y el pobre Santa Claus quedó enredado en una serie doble de líneas de poder.
Tras varios minutos de estar colgado, bajo el riesgo incluso de quedar electrocutado, y ante los gritos de histeria de la muchedumbre quienes no podían creer lo que estaba ocurriendo e incluso hasta temían por la vida del infortunado Santa Claus, llegó tanto la policía y los bomberos para intentar rescatarlo. Tarea que, como ya hemos mencionado, no fue para nada simple o fácil.
Los intentos de rescate llevaron un tiempo relativamente prolongado, ya que se debió cortar la energía eléctrica al área entera y además asegurarse de que el abultado traje de Santa Claus, el cual tenía relleno para simular los kilos de más del hombre del polo norte, no se zafara y propinara al paracaidista al vacío.
Al ser rescatado por los bomberos, Niles perdió su barba y su peluca, los niños que aun quedaban viendo el espectáculo quedaron horrorizados y prontamente un coro de llantos al unisono comenzó a escucharse. El hecho fue llamado por la prensa como «El Fiasco de Navidad,» resultando en un duro golpe a la reputación de Joe N. Morris, alcalde de Fort Lauderdale sobre quien recayó gran parte de la culpa.
Ciertamente, y si bien esto casi le cuesta su carrera política al Joe N. Morris, el episodio fue una tragedia que terminó con suerte. A pesar de varios niños traumatizados, al menos no hubo ninguna victima y con los años el suceso comenzó a ser recordado con un tono humorístico.
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