El avance científico victoriano
Los seres marinos de vidrio que veremos a continuación fueron creados durante el siglo XIX, tiempo durante el cual, impulsado por la inmensa prosperidad que la reina Victoria trajo al Reino Unido, el mundo vio algunos de los mayores avances científicos en la Historia hasta ese momento. Avances que propiciaron los grandes viajes por el mundo, como el realizado por Charles Darwin en el HMS Beagle, pero por sobre todo fue artífice de una reforma académica que dio nacimiento a la ciencia moderna.
Rigurosa, y extremadamente metódica, la enseñanza en las mayores universidades británicas comenzó a requerir de herramientas de aprendizaje capaces de transmitir ideas de manera visual. Esto prontamente se expandió a toda Europa e infinidad de tratados ilustrados sobre la naturaleza como los realizadores por Alexander Von Humboldt y el bellísimo libro de biología marina ilustrada de principios del siglo XX Kunstformen der Natur de Ernst Haeckel así como modelos que recreaban seres de vidrio comenzaron a utilizarse en museos y salones de clase.
Esto por supuesto dio inicio a todo un nuevo arte en si mismo, las esculturas de vidrio y cerámica anatómicamente correctas. Esculturas que representaban desde tejidos hasta organismos microscópicos en magnífico detalle, tanto en su forma como en su textura, patrones visuales y colores. Si bien el utilizar esculturas en la enseñanza provenía de mucho antes, los griegos y romanos utilizaban figurillas de barro para describir ciertos animales u órganos, fue en esta época en la que las mismas comenzaron a fabricarse de manera rigurosa y precisa para ser utilizadas en los salones de enseñanza mismos, todas de manera manual y artesanal, ya que nunca se estableció una línea de producción en serie.
Ciertamente el mejor ejemplo de combinación entre el arte y la ciencia alguna vez realizado.
Los seres marinos de vidrio de Blaschka
No obstante de todas estas, fueron las realizadas por Leopold y Rudolph Blaschka las más espectaculares e impresionantes alguna vez hechas. Este padre e hijo basados en Alemania se denominaban a sí mismos como artistas de la historia natural, y se especializaron en fabricar microbios y animales marinos de todo tipo, creando coloridas bestias de vidrio capaces de asombrar a cualquiera.
A continuación vemos la variedad y la gran diversidad de modelos producidos por la familia Blaschka:
Su trabajo sería encargado y buscado por instituciones y museos de todo el Reino Unido, y con el paso de tiempo de universidades de toda Europa a medida que su obra se popularizaba y ganaban renombre en toda la comunidad científica. Si bien estos talentosos artistas se especializaban en reproducir seres microscópicos, también realizaron varias esculturas de medusas, crustáceos, y otros seres marinos.
Esto último principalmente se dio cuando la biología marina comenzó a ganar un auge de mucha importancia en las instituciones de enseñanza superior debido a la exploración de los polos y las exploraciones submarinas mediante trajes de buceo muy avanzados para su época. Cada año se descubrían seres cada vez más fascinantes, como las medusas gigantes del Japón, que si bien era muy conocidas y estaban bien estudiadas en dicho país las mismas eran completamente desconocidas y asombrosas en Europa.
El pulpo a continuación nos muestra el fino trabajo de texturado realizado sobre el vidrio, esta es una de las tantas de las técnicas perdidas de la familia Blaschka.
Así mismo, los hallazgos sobre la vegetación marina eran cada vez más asombrosos, como por ejemplo el furor que causo el hallazgo de los crinoideos, seres que en ese momento se consideraban como híbridos entre animales y plantas.
Según el fotógrafo Guido Mocafico, quien ha fotografiado cientos de estos modelos de vidrio, los Blaschka no tenían asistentes ni escribieron en ningún jornal descripciones de sus técnicas, razón por la cual cuando murió Rudolph se llevó consigo la técnica a la tumba y al día de hoy nadie ha podido replicarla. Lo anterior nos recuerda a muchos otros ejemplos de secretos celosamente guardados por sus creadores en el pasado que terminaron perdiéndose, como por ejemplo el famoso acero de damasco.
La siguiente imagen de una Synapta maculata nos permite observar las texturas del vidrio y los pequeños detalles tanto de color como los diminutos apéndices de los seres marinos recreados por la familia Blaschka.
La pérdida de las miniaturas de Blaschka
Muchas de las piezas creadas por estos padre e hijo se perdieron en archivos universitarios. Uno de los hallazgos o redescubrimientos más grandes fue realizado en la universidad UW-Madison, donde un grupo de investigadores que se encontraba catalogando los contenidos del Museo de Zoología de la universidad encontraron cajas como una gran cantidad de miniaturas.
Un arte similar pero mucho más dulce: en Japón existe un arte muy similar, en la cual los animales marinos son generalmente la pieza central, denominada amezaiku, la misma se basa en crear esculturas muy detalladas, solo que en vez de estar hechas de vidrio están hechas de caramelo.
Las piezas fueron originalmente adquiridas por el director de UW-Madison quien se encontraba reconstruyendo los archivos y colecciones de la universidad tras que un incendio a finales del siglo XIX destruyera gran parte de las colecciones científicas de la institución. Junto a las piezas los investigadores hallaron un catálogo con más de 700 ofertas disponibles.
Según informa Setphen Koob uno de los expertos del Museo del Vidrio de Corning, en el presente muchos de los modelos se están deteriorando rápidamente debido a la pérdida de estabilidad con el paso de las décadas y los siglos de los materiales utilizados originalmente para su fabricación. Sobre todo los materiales adhesivos utilizados para sostener las partes. Debido a esto, antes de exponer las piezas halladas las mismas deben ser restauradas y tratadas con distintos químicos y materiales que ayuden a estabilizar sus materiales.
Los seres marinos de vidrio son ciertamente asombrosos, y más asombrosas aún son las técnicas de creación de los mismos. Si deseas continuar aprendiendo sobre el maravilloso arte de la creación artística y ornamental del vidrio te recomendamos ver el documental holandés Glas, el cual dura 15 minutos y ganó un Oscar debido a su belleza. El mismo documenta el trabajo artesanal de los artistas creadores de vidrio ornamental en Holanda a mediados del siglo XX.