Las aspas de los helicópteros
A mediados del siglo XX la Marina de los Estados Unidos contrató los servicios del fotógrafo especializado Adreas Feininger para que este capture de manera visual e impactante el patrón de las aspas de un helicóptero en pleno vuelo. No obstante, existe un lugar apartado en los desiertos de Afganistán donde esto ocurre de manera natural, a simple vista y sin la necesidad de utilizar equipos fotográficos avanzados gracias a un fenómenos visual denominado como el efecto Kopp-Etchells.
El efecto Kopp-Etchells
Uno de los principales problemas logísticos sufridos por las fuerzas estadounidenses y británicas en los comienzos de la guerra en Afganistán fue el increíble y acelerado nivel de erosión que causaba la arena en las palas de los rotores de helicópteros de transporte al despegar y aterrizar muy frecuentemente.
Como el dejar de aterrizar en lugares con arena no era opción y las soluciones previas a éste problema no eran suficiente, la perspicacia de los ingenieros llevaría a desarrollar una solución tan ingeniosa como simplista.
Ésta nueva solución ampliaba sobre una ya existente, y consistió en dotar las palas con láminas abrasivas hechas a partir de titanio y níquel. Éstas láminas abrasivas, al chocar contra varios miles de los granos de arena circundantes, llevan a generar un efecto piezoeléctrico.
Efecto que tiene lugar cuando tras el fuerte impacto los cristales de cuarzo en los granos se comprimen rápidamente polarizándo su masa y causando una diferencia de potencial entre las cargas electrostáticas de su superficie. Inmediatamente éstos campos se descargan sobre los cristales vecinos llevando a que varios miles de granos estallen y logrando de ésta manera limpiar o barrer el área circundante a las palas del grueso de la arena.
La utilidad del helicóptero: desde su invención el helicóptero se convirtió en el vehículo volador más útil y popular del mundo entero. Los mismos son utilizados en tareas tan disimiles como por ejemplo desde llevar la los operarios del faro ubicado en la isla más pequeña del mundo, isla a la cual hoy se llega solo en helicóptero y cuyo antiguo faro prácticamente ocupa el 95% de la superficie de la isla, hasta para transportar a los operarios que reparan las peligrosas torres de alta tensión sin que estos toquen el suelo.
Así mismo y a su vez, debido a lo impactos ocurren varios fenómenos triboeléctricos -electrificación causada por el frotamiento entre distintos materiales con distintos niveles de aspereza superficial-
El efecto fue nombrado a partir de Benjamin Kopp y Joseph Etchells, dos miembros de las fuerzas estadounidenses y británicas que estudiaron el fenómeno durante el año 2009. Si bien el mismo es muy visible a simple vista, sobre todo por la noche, es extremadamente difícil su captura en fotografías y vídeos debido a los tiempos de exposición necesarios -en especial con las cámaras digitales-.
Las fotografías aquí mostradas fueron tomadas por el corresponsal de guerra Michael Yon, quien asombrado por el fenómeno se valió de lentes especiales con amplificación nocturna.